Jaime Navarro Del primero se afirma que es maestro o docente, como se dice ahora. Del segundo no hay duda ninguna: maestro entre maestros de los que sólo aparece uno cada 50 años. A lo sumo.
El primero dice ser valenciano. Y al parecer valenciano habla. Pero no se le conoce, al menos popularmente, ningún logro en la lengua del Tirant Lo Blanch. Y no sólo eso. Incluso llega a afirmar que esa lengua tan vieja ni siquiera existe. Como ya hemos dicho al principio, al parecer es docente. Lo que se les dice ahora.
Sin embargo el segundo, más conocido por "El Titi", se desenvuelve en nuestro recuerdo a las mil maravillas mientras indistintamente nos canta en valenciano o en castellano. O en español. Que este no tiene manía alguna. Y se considera tan maricón como español. Ah y además de bilingüe, a la vez suda y baila. Siempre sin parar: añorado rey de los escenarios, de los cabarets, de las fiestas populares y de la fantasía.
El primero, de nombre Joan al parecer siempre ha vivido de las pagas públicas. Hasta donde se sabe. Sin embargo el otro, llegó a tener un grupo teatral festivo propio. Que dio de comer, por cierto, a muchos churumbeles y a muchas familias. Y al fisco y la seguridad social. Por eso incluso tiene busto en Valencia. En frente de la fuente de la " Pantera Rosa". Para más señas.
Este segundo también, llegó tan lejos en su noble arte, que casi 20 años después de su muerte, todavía resuena como himno de liberación gay, precisamente su insuperable "Libérate". A Baldovi, aunque al parecer también es "valenciano", después de tantos años en política, no se le conoce ningún logro. Ni artístico, ni intelectual, ni político.
Otra diferencia a resaltar: Rafael Conde jamás hubiera vestido con el desaliño impostado de un diputado que se embolsa más de 5.000 eurazos mensuales por, como se ve, no lograr nada para su tierra. Jo, es que se nos vuelve a morir; el bueno de" El Titi"...antes muerto que sencillo.
También tienen claras divergencias en lo tocante a la fiesta de Las Fallas. Baldovi sólo está de acuerdo con que se ridiculice y queme a curas, monjas, obispos, frailes o Papas. E Iglesias o así. Como siempre y con naturalidad se hace en los monumentos falleros. También está de acuerdo en que ardan tras ser escarnecidos todos sus oponentes políticos.
Pero sobre la religión del "amor", cuando le preguntan...no comenta. Y acusa de "nazis" a los artistas falleros que osan llamar ratas a sus jefes de filas. Que él los sigue teniendo en Barcelona. Aunque La Caíxa y el Sabadell se hayan mudado a la nostra terra. Antiguo que es el tipo. O tal vez, fiel criado.
Sin embargo, Rafael Conde " El Titi", además de donarnos un himno gay inmortal e internacional, es tan valenciano por los cuatro costados, que también nos regaló un himno fallero para la eternidad: su insuperable y por tan trágico: " Noche de Fallas". Y a don Rafael de Las Fallas, le gustaba todo. Y que todas. Todas. Prendieran en Sant Josep. A que Santo...!
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