El
Ayuntamiento de la Pobla
de Vallbona ha incrementado en 21.000 euros el fondo destinado a las
subvenciones agrarias que cada año concede el consistorio. Si el año pasado el
presupuesto era de unos 50.000 euros, este año se ha pasado a la cifra de
71.000 euros.
Este
aumento es debido a varios factores. Ha crecido el número de solicitantes y la
cantidad de superficie agraria, lo que indica también que en los últimos años
se ha incrementado en la Pobla la superficie de cultivo. Además, los caminos
rurales están cada vez en mejor estado, lo que supone un menor gasto en
mantenimiento para el Ayuntamiento, hecho que también ha repercutido
directamente en la subvención.
El plazo
para solicitar las ayudas ya está abierto. Las solicitudes se pueden presentar
hasta el 30 de abril en el Centro Social, de lunes a viernes 8 a 11 horas de la mañana y los
miércoles de 17 a 20 horas. Se trata de explotaciones agrarias en perfecto
estado de cultivo, de regadío o secano, que tengan unas dimensiones iguales o
superiores a 6 hanegadas.
Los
requisitos para acceder a estas subvenciones son acreditar la propiedad de
terrenos agrícolas con la condición, también acreditada y demostrada, de
explotación en perfecto estado de cultivo, y acreditar el uso de buenas
prácticas agrarias, presentando un buen estado de los campos, limpias de broza,
árboles secos o escombros.
Las
subvenciones se otorgan por hectárea de regadío y de secano, y la subvención
final varía en función del número de solicitudes, además de compensarse a los
cooperativistas y a los que acrediten la condición de ‘Joven agricultor’. El
año pasado se recibieron un total de 298 solicitudes.
El
Ayuntamiento de la Pobla de Vallbona es pionero en la concesión de estas
ayudas. Desde que en 2008 la alcaldesa Mari Carmen Contelles, firmó el primer documento
de concesión, la respuesta del sector agrícola ha sido cada vez mayor. Siete
años después, la propia Contelles ha manifestado que “la iniciativa es hoy en
día fundamental para nuestra localidad. Ayuda a promover la agricultura,
fomenta el cultivo y contribuye a la buena salud paisajística de la Pobla,
además de mejorar en gran medida la prevención de incendios y la conservación
del medio ambiente.”
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